El número de niños en situación de trabajo infantil en América Latina y el Caribe disminuyó de 20 millones en el año 2000 a 12,5 millones en 2014, lo cual representa un logro importante y al mismo tiempo plantea el desafío de invertir los recursos para seguir avanzando hasta su eliminación dentro de una década. Sin embargo, la noticia preocupante es que al mismo tiempo aumentó el trabajo peligroso, que pasó de 9 a 9,6 millones de niños.
Para esto, el
Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infanti –IPEC (por su sigla en ingles) de la OIT, concentra sus esfuerzos en prestar asistencia técnica a los países para el diseño y puesta en marcha de una política nacional efectiva destinada a disminuir progresivamente el trabajo infantil e incluye asesoría especializada en aspectos legislativos tendientes a la aplicación y cumplimiento efectivo de los convenios fundamentales de la OIT núm.138 y núm. 182 referidos al trabajo infantil.]]>